Un escrito que me pareció magnífico para compartir…De pronto enfermas…
Y no entiendes el motivo.
Pero te olvidas que has estado enfocando tus energías a un problema personal.
Que guardas tanto odio a quien te lastimó que no te permites siquiera pasarlo por alto.
Que constantemente criticas a terceros y te alimentas de envidias.
Que no olvidas aquella ofensa que comenzó pequeña y ahora es cal en el corazón.
Que estás lleno de miedos y no te permites enfrentarlos.
Que te niegas a escuchar a otros y tu egoísmo no permite ver lo bueno que te ofrecen.
Que estás lleno de propósitos pero tu indecisión no te permite comenzar ninguno.
Que guardas un dolor profundo desde tu Niño interior al cual traicionaste no siendo el adulto que prometías.
Que te reprochas constantemente tus fallas y eres el juez más duro contigo.
Olvidas que somos un canal divino de energías y que cada una de ellas fluye como torrente sanguíneo dentro de nosotros.
Date un momento para meditar y revisa que parte de ti se está auto destruyendo.
Recuerda: «Lo que el corazón calla, la mente lo entierra. el cuerpo se enferma y el alma se quiebra»
Cortesía kok-uhga
BioAlineación Medicina del Alma 