¿Que prefieres Intuición o Ego intelectual?
Intuición
El halcón no piensa durante la caza.
No se preocupa por la teoría o por la ética.
Todo lo que hace es natural.
Los animales viven vidas simples cercanas al Tao. No necesitan pensar o razonar: Nunca dudan de sí mismos. Cuando tienen hambre, comen. Cuando están cansados, duermen. Responden a los ciclos del día acorde a su intuición. Se emparejan en la estación adecuada, y nutren a sus pequeños acorde a su propio entendimiento. Cuando mueren, caen bajo los dientes de los depredadores o ante el desapasionado cambiar de las estaciones.
En contraste, nosotros como seres humanos nos separamos de la norma natural, y nos preocupamos sobre la acción ética. Los extremos de comportamiento se han vuelto más variados, cubriendo toda la gama desde lo sádico hasta lo moralista. El Tao considera todo eso artificial y antinatural. ¿Por qué divorciarnos de la naturaleza?
El seguidor del Tao prefiere vivir completamente en concierto con el Tao, evitando la interferencia de la teoría y el pensamiento excesivo. Aunque primero debamos aprender rigurosamente habilidades y ética, debemos llegar a encarnarlas tan completamente que se vuelvan subconscientes. Reaccionar a una situación preguntándose qué está bien y que está mal ya es demasiado lento. Uno debe hacer intuitivamente lo que es correcto. No debería haber presagios sobre un acto, ni dudas acerca de uno mismo.
Pareja
La pasión no es sino un preludio a
Años de gradual despliegue.
Algunas personas se emparejan de por vida. Tal vez sus aventuras amorosas comienzan con encaprichamiento, pasión y erotismo. Eventualmente eso da paso a un compañerismo más estable. No todas las parejas pasan intactas este período de transición, sino aquellas que encuentran un nuevo modo de relacionarse el uno con el otro. Amantes devotos encuentran que se pueden aceptar los defectos menores. A su vez, encuentran aceptación a pesar de sus propios defectos e inseguridades inherentes.
El amor maduro es paciente, desinteresado, generoso y amable. El amante se vuelve más importante que el yo. En el amor, encontramos trascendencia y una unidad que nos es inalcanzable estando solos.
Muchos sabios hablan en contra del amor romántico. ¿Podrá ser que no lo han sentido nunca o que hayan sido amargamente decepcionados? Los individuos deberían conocerse bien a si mismos. Si están hechos para el amor, lo sabrán.
En última instancia, el otro es divino y la divinidad habita en el otro. A través del amor, uno puede conocer la belleza de la unidad y la totalidad. Sin lo femenino, el elemento masculino es estático y estéril. Sin el elemento masculino, lo femenino es potencial ilimitado sin un catalizador. A través de la unificación, encontramos altruismo, pureza y divinidad.